La Real Sociedad sufrió hoy una de las derrotas más dulces de su historia. Perdió por 0-1 ante el Manchester United en un Reale Arena que rozó el lleno y logró su clasificación como primera de grupo, así como su acceso directo a los octavos de final de la Liga Europa, evitando una ronda eliminatoria previa ante uno de los equipos procedentes de la Liga de Campeones.
Imanol Alguacil ni hizo rotaciones ni cambió de sistema. Utilizó el mismo esquema y los mismos jugadores que perdieron el domingo ante el Real Betis, incluido el canterano Pablo Marín, que volvió a ser el elegido para hacer de David Silva en la punta del rombo.
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Fiel a las palabras de su técnico el día anterior, la Real Sociedad no salió a esperar atrás y se fue a buscar al Manchester United a su campo con una presión que fue indescifrable para los de Ten Hag, incapaces de superar el medio campo con el esférico en sus pies.
Los 'txuri urdin', recuperando muy rápido el balón las pocas veces que no lo tenían, jugaron muy cómodos y generaron peligro, como un pase en profundidad de Merino para Carlos Fernández que el sevillano, escorado, estrelló en el lateral de la red.
Gol
Sin embargo, superado el cuarto de hora un pelotazo en largo de De Gea tratando de sacudirse la presión realista fue cabeceado por Bruno Fernandes; la prolongación la ganó Cristiano, que rápidamente habilitó en profundidad a Garnacho, cuya velocidad dejó en evidencia a Gorosabel, plantándose ante Remiro para batirle con un disparo arriba, inapelable.
Un zarpazo fue suficiente para evidenciar la pegada de un Manchester United que, sin hacer ruido, inyectó en la Real una dosis de precaución que le hizo jugar con pies de plomo a partir de entonces, sin asumir riesgos, sin exponerse lo más mínimo.
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La Real pudo terminar amarrando un primer puesto que le mete directamente en octavos de final y le permite aligerar su calendario.